La gran apuesta de Begoña Basauri: transformación total para su regreso

El próximo lunes 17 de marzo, Mega estrenará El jardín de Olivia, nueva teleserie que traerá de vuelta a reconocidos actores y dará la bienvenida a nuevos talentos. Uno de los regresos más esperados es el de Begoña Basauri, quien, tras años alejada del género, sorprendió con un drástico cambio de look, dejando atrás su distintivo cabello pelirrojo para este proyecto.

En diálogo con El Filtrador, Basauri entrega detalles sobre su personaje, el desafío de transformar su apariencia para dar vida al rol en la ficción y el significado que tiene para ella su regreso a las teleseries tras una extensa ausencia.

¿Cómo vive Begoña Basauri su regreso a las teleseries tras un período alejada de la actuación?

No estaba en teleseries desde Verdades Ocultas (Mega), donde interpreté a «Muriel», una enfermera que iba a robarse una guagua y después se arrepiente. Estoy súper feliz y contenta de volver al Área Dramática de Mega, sobre todo de hacerlo con la Quena (Rencoret, directora del área), quien me descubrió. Con ella hice mi primera teleserie y, además, quien dirige esta producción en la primera unidad, Víctor Huerta, también fue mi director en esa primera teleserie. Entonces, es bastante significativo lo que sucede ahí. Es emocionante volver a trabajar con gente con la que compartí mis inicios. Además, tenía muchísimas ganas de volver a hacer teleseries, así que estoy súper feliz.

¿Qué nos puede contar sobre su personaje en El jardín de Olivia?

La describiría como una mujer muy decidida, muy clara en lo que quiere y muy ambiciosa, aunque no siempre en el buen sentido de la palabra. Creo que la ambición puede ser un gran motor que nos mueve a todos en el día a día, pero a veces «Vanessa Riesco», que es mi personaje, deja que esa ambición la lleve incluso a pasar por encima de ella misma, de lo que realmente siente, con tal de conseguir lo que quiere. Y aunque es una mujer súper segura, con la llegada de «Diana» su mundo se tambalea por completo y toda la estabilidad que había logrado se pone en jaque.

El desafío más grande de interpretarla ha sido que no sea una villana en sí misma. Se trata de lograr la tridimensionalidad del personaje. Que no sea solo la mala, por decirlo de alguna manera. Porque definitivamente es la antagonista. Pero también se trata de defender el rol desde la perspectiva de que, a veces, las personas son «malas» o hacen cosas «malas» porque están motivadas por ciertas razones. Eso ha sido un desafío bien grande. Y, a la vez, muy entretenido actoralmente.

¿Cómo vivió Begoña Basauri el radical cambio de look que tuvo que hacer para la teleserie?

Dejé el color pelirrojo, que fue tan característico desde El señor de La Querencia (TVN) en adelante. Estoy hablando de más de 15 años. Pero era un cambio de look que me tenía bastante ilusionada. Cuando me mostraron el look de «Vanessa» fue como «ya, démosle con todo». Vuelvo a las teleseries después de muchos años y me encanta hacerlo con un look que sea distinto, que aporte un refresh y un cambio claro. Pero amo ser pelirroja, así que puede que vuelva, dependiendo también de si vienen nuevos proyectos. En ese sentido, como actriz, soy súper entregada; no tengo apego de «no me corten el pelo» o «no me lo tiñan». Al final, crece, son cambios momentáneos.