En los realities show chilenos existe la emblemática figura de Carlalí para apodar a quien se convierte en el primer eliminado en un espacio de telerrealidad. Un título que en Tierra Brava se lo adjudicó Camila Campos, conocida como Camilísima.
Es que la periodista fue la primera participante en abandonar la hacienda ubicada en Perú donde se desarrolla la nueva apuesta de Canal 13. El jueves se emitió el capítulo en que pierde ante Camila Arismendi, su rival en la prueba de eliminación, y deja el programa.
En conversación con El Filtrador, Camila Campos evalúa positivamente su breve paso por Tierra Brava, incluso no descarta reingresar si tuviera la oportunidad.
¿Qué le jugó en contra en la competencia de eliminación?
Estaba enferma, fue 100% eso. Obviamente fue un tema de concentración, mi mente estaba en otra. Queda evidente que no entendí las instrucciones, porque realmente mi cabeza no estaba 100% en la competencia. Lo intenté, lo intenté, pero la enfermedad me ganó, me azotó.
¿Hay algún participante de Tierra Brava que le habría gustado conocer más?
Quedó una conversación pendiente con Fabio (Agostini), que se hizo evidente ahí que había una onda especial. De hecho, él le comentó al equipo verde luego del incidente del chocolate: '¿Qué tiene de malo darle un chocolate a la niña que me gusta?'. Ahí me enteré de que en verdad tenía aparentemente sentimientos, así que buena onda. Me enteré en el programa, o sea, afuera.
Ya estando fuera del programa, ¿vio alguna cosa que le haya molestado o que le habría gustado aclarar?
Me pasó que la Shirley (Arica) hizo un comentario que no me agradó después de la competencia de salvación y yo sentía que teníamos muy buena onda y no sé qué le pasó, se le cruzaron los cables. Comentó que yo me había acercado a ella para decirle 'Shirley estuvo súper peleado, por 20 segundos'. Y ella después sale hablando, no me acuerdo con quién, 'y le dice 25 segundo, te gané'. Me sorprendí igual. Dije, pucha acá está difícil hacer amigos. Difícil porque estamos todos compitiendo.
La experiencia al interior de Tierra Brava
Según explica Camila Campos, en el reality “está todo el mundo tratando de sobresalir de alguna manera y tejiendo sus estrategias”. Y en su caso, comenta que “para mí era una experiencia nueva. Si surgían nuevas amistades feliz, si surgía amor también feliz”.
¿Algún participante del programa no le cayó bien?
La Dani Castro no me gustó mucho una conversación en la que ella me buscó, y me insistió demasiado en hablar del tema. No me gustó esa actitud de ella.
¿Cuál fue esa conversación?
No salió al aire. Pero ella se había acercado a mí para hablar del Seba (Ramírez, su expareja, hoy en Gran Hermano), y el tema de la paternidad. No sé si ella lo hizo con una doble intención, y no creo que por algo personal conmigo. Yo creo que cada uno estaba jugando sus cartas y esa es una carta dura; irse a buscarle tema a alguien que había estado con una persona que genera comentarios por esa situación... ella se quiso meter ahí nomás.
¿Cómo calificaría su paso por Tierra Brava?
Cortito, me quedé con gusto a poco. Quedaron conversaciones pendientes, pero para mí, desde mi punto de vista, estoy conforme. Di el 100%, salvo por el tema de la enfermedad que me jugó mucho en contra.
¿Volvería al reality si tuvieras la opción?
Obvio que sí, trabajo es trabajo. El trabajo escasea, así que no hay que hacerle asco a nada. Yo volvería en la misma parada y quizá con la ventaja de que uno afuera se va enterando de cosas y va entendiendo cómo se está manejando todo, considero que eso siempre va a ser bueno.
¿Quién cree que podría llegar lejos en Tierra Brava?
Ninguno, todos se van a ir (ríe). Yo vi bastante fuerte a Simón (De la Costa), Fabio y a Luis (Mateucci). Siempre van a tener ventaja los que son chicos realities de antaño porque conocen perfecto el juego.