Mariana Derderián olvida lío con CHV y reaparece «depilando» personas

Ha pasado casi un año desde que Mariana Derderián enfrentó la trágica pérdida de su hijo en un incendio que afectó su hogar. Desde entonces, la actriz ha mantenido un bajo perfil, con escasas apariciones públicas, salvo por algunas reflexiones que ha compartido en sus redes sociales.

Cabe recordar, hace unas semanas Derderián había aceptado dar su primera entrevista televisada en el programa Podemos Hablar de Chilevisión. No obstante, decidió desistir de participar luego de enterarse del tono sensacionalista con el que el canal promocionaba la conversación. Tras ese incómodo episodio, la actriz reapareció en sus redes sociales para publicar una crítica.

¿Qué dijo Mariana Derderián en su nueva reflexión a través de redes sociales?

Mediante una publicación en Instagram, la actriz inició su mensaje con las siguientes palabras: «Vivir vs. Existir. A veces, la vida te invita a tomar una pinza y depilarte a ciertas personas. Así que creé dos grandes grupos: las que viven, están conectadas, empatizan, son profundas, sienten el dolor propio y también el dolor ajeno. Miran con distancia y perspectiva, son autocríticas, reconocen sus errores, los enfrentan, los asumen. Hay valentía, sensatez y honestidad, buscan crecer y no evitar. Dan la cara y son de verdad», indicó.

Por contrapartida, Mariana Derderián destacó a quienes, desde su perspectiva, encarnan valores opuestos «Sienten el dolor propio, pero del dolor ajeno ni se enteran. Acomodan la realidad a su conveniencia, inventan mentiras y se convencen a ellos mismos que esa es la verdad. Y como se creen sus propias mentiras, se encuentran la razón. Así es como se encuentran fantásticos y se justifican», lanzó.

«No son capaces de revisarse y la autocrítica no la conocen, en el fondo son cobardes, tremendamente superficiales, evaden responsabilidades y ni siquiera son conscientes de ellas (lo que resulta más triste aún)», agregó.

La actriz cerró su reflexión con una dura sentencia: «Gente de cartón, que presume ser de verdad. Gente vacía. Y ojo que el vacío, paradójicamente, es tremendamente pesado. Mientras, tomo la pinza y me depilo personas».