Tras casi una década como rostro ancla de Zona Latina, Mario Velasco puso fin a su etapa en la señal privada al presentar su renuncia el pasado viernes 3 de octubre. La noticia, como era de esperarse, generó una serie de especulaciones sobre el motivo de esta decisión.
Ante esto, el conductor abordó por primera vez su sorpresiva partida de “Zona de estrellas”, revelando una mezcla de desgaste profesional, nuevos proyectos y un polémico “ninguneo” que gatilló en su salida.
En diálogo con diario Las Últimas Noticias, Mario Velasco aseguró que su renuncia no fue impulsiva. "La venía masticando hace un tiempo, ya venía en el fondo con esta idea de cerrar el ciclo y ver para adelante qué hay en términos comunicacionales y también habiendo sembrado en otras áreas", sostuvo.
"Me pasó en los últimos meses a lo mejor no estar tranquilo con mi rendimiento o con lo que estaba pasando conmigo laboralmente", reconoció el comunicador, sincerando que su renuncia fue "no tener que seguir en algo que tal vez no me satisfacía".
El "ninguneo" a Mario Velasco
Aunque insistió en que no hubo un solo motivo, el ahora exrostro de Zona Latina relató un incidente administrativo que evidenció el desgaste de la relación con el canal. "Fui a sacar mi auto y hubo dificultades para hacerlo, porque una jefa, que no la cachaba bien, había dado la orden de que no podía sacar mi auto después de las 10", contó.
Si bien no fue la razón de su renuncia, el episodio le dejó una sensación amarga. "Son cosas que uno va diciendo 'bueno, si esta alguna vez fue mi casa, mi lugar en el mundo, hay muchas cosas que me están diciendo que hoy no, no estoy contento como antes'", reflexionó.
Por otra parte, Mario Velasco aclaró que su decisión no es una despedida definitiva de la televisión. "Si llega algo, espectacular", comentó. Sin embargo, por ahora su foco está en otros rumbos. El conductor está dedicado a su chocolatería japonesa, Kenko, que se encuentra en plena expansión; además, se encuentra desarrollando una aplicación y otros proyectos artísticos.
Sobre su abrupta salida, que no le permitió despedirse en pantalla, el comunicador se mostró tranquilo y abierto a hacerlo si se da la oportunidad: “Podría darse perfectamente, pero no lo tengo tan claro. Y si para mi jefe o para mí es importante hacerlo, por supuesto, no hay ningún problema. También creo que el Zona de estrellas necesita que se renueve y eso también es parte de los ciclos. No hay mucha polémica”, cerró.