Alejada de la televisión, Javiera Acevedo se ha avocado a distintos proyectos, entre ellos, su trabajo en un centro médico de Iquique donde fue contratada en el cargo de «gerente de felicidad».
«Doy consejos que a mí me gustaría que me diera una persona que yo quiero mucho», explicó hace algunas semanas a diario La Cuarta. Sin embargo, sus palabras no sirvieron para acallar los diversos cuestionamientos que recibió a su capacidad para ejercer este nuevo rol.
Por lo mismo, en primera instancia, la modelo rompió el silencio a través de redes sociales, al manifestar que quienes la criticar son «unos picados, faltas de respeto y falta de vocación porque ya dije que no soy psicóloga, pero no le hago daño a nadie. Solo hago a personas más felices«.
Palabras similares emitió en las pantallas de Intrusos, programa con el que conversó sobre este bullado tema. «Me llamó la atención la manera en que se lo toman algunas personas, donde me dicen ‘oye, cinco años de haber estudiado psicología para que tú vengas a quitar la pega’. Jamás he dicho que soy psicóloga. Estoy ahí con un equipo de psicólogos, médicos tratantes de todo tipo, nutricionistas», dijo.
Y continuó, aclarando que «no le voy remedios a nadie, no los diagnostico. Creo que si uno trata de hacer un bien por una persona que tiene un trauma, o algo así, yo no le voy a dar un mal consejo. Lo escucho, le pongo atención».
«Yo solamente quiero dar alegría, yo soy una persona feliz, la gente me quiere», expresó al espacio de farándula, agregando que sus padres están orgullosos de su nuevo trabajo, así como también, que no recibe remuneración por la iniciativa. «Eso la gente no lo sabe y no lo tengo porqué decir… Yo no le vengo a quitar la pega a nadie. Voy por amor«, sentenció Acevedo.