En la edición de anoche de Mundos Opuestos (Canal 13), se vivió un intenso duelo de eliminación entre Leonardo Vallana, conocido como «Princeso», y la influencer Thammy Palma. Finalmente, fue el primero quien se impuso, convirtiendo a la oriunda de Los Ángeles (Chile) en la segunda eliminada por competencia del programa.

En conversación con El Filtrador, Tamara Palma compartió cómo vivió su experiencia en el reality de Canal 13; narra también con qué compañeros logró construir vínculos más cercanos y cómo fue su convivencia con «Princeso», con quien protagonizó el primer conflicto del programa.

¿Cómo vivió la competencia contra «Princeso» que terminó con su eliminación de Mundos Opuestos?

La competencia fue intensa, aunque siempre me jugó en contra mi mente, esa es la verdad. Siempre estaba pensando en el ‘quiero estar’. Igual pensé mucho en llamar a mi novio, llamar a mi mamá, entonces como que estaban esas dos cosas. Estaba compitiendo, pero igual estaba jugando en mi mente con las dos cosas, pero traté de hacerlo lo mejor. Y sí, fui lenta, muchos dijeron eso, pero de verdad intenté hacerlo mejor. Soy lenta y disculpen.

¿Qué aprendizajes le dejó esta experiencia y cómo cree que la transformó a nivel personal?

A nivel personal me fortaleció mucho ya que ahora sé en quién confiar y en quién no. También vi cómo soy como persona, que eso siempre es muy importante porque uno siempre dice ‘no, yo soy así, yo soy aca’, pero cuando uno se ve desde afuera, desde una pantalla, o se ve cómo se expresa o cómo hace las acciones, es distinto. O sea, yo a pesar de que tuve la inmunidad, la regalé. Yo la volvería a regalar, a pesar de todas las cosas. ¿Por qué? Porque yo sé que era una persona y sé lo que yo pienso y lo que siento. Y siempre voy a creer que es más valioso los valores de uno que, no sé, una pantalla. Sí, yo amo la pantalla, me gustan las redes, me gusta todo eso. He hecho muchas cosas por ello, pero no voy a jugar con la salud de una persona por eso.

Usted convivió con el «Princeso» en el encierro. ¿Cree que todo es parte de un personaje o logra ver otra faceta de él en Mundos Opuestos?

No, no es un personaje, primero que todo. Yo que conviví con él puedo decir que no es un personaje, él es así. Como que su persona la envasa, como que trata de ser un personaje. Pero hay un momento que ya deja de ser «Princeso» y empieza a ser Leonardo, como decía. Y, pucha, nada, yo la verdad… yo no lo aislé, porque lo aisló el grupo. Yo no era parte, yo estaba en el grupo, pero no era como que la líder del grupo, nada. Yo traté de, ¿cómo se puede decir? sobrevivir, estar tranquila con mis emociones, convivir, compartir y disfrutar de la experiencia, sin pensar que el «Princeso» está ahí. Porque, al final, si yo pensaba en que el «Princeso» estaba aislado, me daba pena. Y también no lo podía ayudar, porque qué sacamos con darle unas charlas de una hora si él va a querer siempre hacer lo mismo. O sea, yo no sacaba nada con darle unas charlas o acercarme a él si no íbamos a empatizar. Entonces, prefería no tomarlo en cuenta (…) igual pude haber hecho algo más, seguramente, escucharlo más o entenderlo, seguramente, escuchar de su persona. No sé, porque nunca estuvo ese momento. Nunca pude decir ‘oye Princeso, ¿cómo estás? ¿cómo fue tu infancia?’. Él siempre tenía una coraza, se hacía pasar como un «Princeso», como él decía. Pero realmente él era él, nomás. Yo creo que fue un niño triste que le faltó algo, algo le faltó. Él puede ser como un perrito que le faltó amor y después estaba en ataque a todos, y mordía a todos y le ladraba a todos. Pero el perrito no quería ser así, el perrito solamente quería amor.

¿Qué la sorprendió para bien y para mal dentro de Mundos Opuestos 3?

Para bien, obviamente, la Nacha (Michelson). Yo pensé que la Nachita me iba a odiar, le tenía miedo, pero no, me sorprendió para bien. Ella igual tiene una coraza que se hace pasar como la villana del reality, pero en realidad ella no es una villana, es solamente una niña que se disfraza de villana para mostrar algo. Ella es súper tierna, de verdad es súper tierna. Uno se sorprende de verdad porque uno creería que ella es como una perra que ladra. No. Ella es muy tierna, de verdad dan ganas de abrazarla. Y a pesar de las cosas que dice, que yo me río, es muy tierna, de verdad. Muy humana.

Respecto a cuáles considera fueron sus errores en el encierro, Thammy Palma comenta que «confiar en personas que seguramente no debí confiar. Ir a hacer amigos a un reality es un error, esto es una pega, al fin y al cabo. No puedo pensar en que voy a hacer amigos en un reality si al final todos van a hacer un personaje, todos van con sus metas propias y al final dicen ser de un grupo y del equipo, pero cada quien va a lo suyo. Van a luchar por su sueño y sus cosas, al final.

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