La comediante Jani Dueñas volvió anoche a los escenarios, dejando atrás su fallido y criticado paso por el Festival de Viña 2019, donde no logró convencer al “monstruo” con su rutina.
Ante un repleto Nescafé de las Artes, la comediante nacional volvió a deleitar al público asistente (985 personas) con el humor que la caracteriza. Pero esta vez la voz en off de “La Divina comida” no estuvo sola: en el escenario la acompañaron sus colegas Paloma Salas y Paloma Elgueta, además de la banda de punk feminista Horregias.
En su rutina, Dueñas se rió de su paso por el escenario de la Quinta Vergara, ante un público que se rindió a sus pies y la aplaudió de principio a fin. El show estuvo marcado por consignas alusivas al Día Internacional de la Mujer.
En la primera parte del espectáculo, la comediante recordó su participación en el certamen festivalero, diciendo: “estuvimos la semana pasada en un festival regional, donde recibimos mucho cariño y buena onda”, agregando que “de verdad estoy muy contenta con ese amor, incluso, la gente ha sido muy amorosa conmigo, imagínate, tuve que cerrar Twitter, fue fantástico”, manifestó Dueñas.
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La también integrante de 31 minutos se refirió, además, al comentado tuit del conserje del Hotel Sheraton, quien la acusó de insultar a su amiga Paloma Salas y de encontrarse en estado de ebriedad, situación que fue desmentida por la comediante y lo definió al interior de su show como “los mejores momentos de la semana”.
El espectáculo continuó con las rutinas de stand up de Elgueta y Salas, además de la intervención del trío Horregias antes y durante las rutinas. Para cerrar, Dueñas presentó un monólogo totalmente distinto al que se apreció en Viña del Mar. En su show abordó lo siútico de los barrios de la capital, el feminismo y las complejidades de la sexualidad femenina.
En este espectáculo, que marcó el retorno de la comediante al escenario, se vio a una Jani Dueñas más relajada, empoderada en su estilo y dejando atrás su fallido paso por Viña.
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