El histórico animador de Sábado Gigante, Mario Kreutzberger, conocido popularmente por su personaje Don Francisco, negó ser el responsable de la ruina de su examigo Armando Navarrete.
Y es que el músico y actor, intérprete por 30 años del reconocido personaje "Mandolino" en el icónico programa, falleció en año 2014 sin desclasificar realmente cómo se produjo el quiebre con Kreutzberger.
Si bien en su momento se planteó que Navarrete y Don Francisco habían tenido una fuerte pelea en la década de los 90's -lo cual fue desmentido en múltiples ocasiones por ambas partes- lo cierto es que, una vez que el actor dejó de colaborar con Mario Kreutzberger tras recibir una oferta laboral en Telemundo, jamás volvió a repuntar ni tampoco volvió a tener un vínculo cercano con el reconocido conductor.
En tal sentido, el hijo de Armando Navarrete, Sebastián, en el libro A la sombra de un gigante, texto que recoge las memorias del actor y que habría sido visualizado por el intérprete antes de fallecer, deslizó que el también animador de la Teletón fue el responsable de arruinar financieramente a su familia.
En tal sentido, y a pesar del paso de los años, en una reciente entrevista con el cuerpo Sábado de diario El Mercurio, Don Francisco se desmarcó de la polémica, declarando no sentir culpas respecto a lo ocurrido con su examigo.
Kreutzberger, confirmando estar al tanto de las declaraciones que el actor y su hijo realizaron, negó que se haya producido una pelea que motivase el quiebre en el vínculo, agregando que "quizás él (Armando Navarrete) se sintió abandonado por mí, pero no. Yo nunca supe que él durmió en una playa de Miami. Lo leí después", dijo en alusión a las precarias condiciones en las que vivía Armando Navarrete tras dejar Sábado Gigante y, posteriormente, ser despedido de Telemundo.
Asimismo, consultado sobre si sentía algún tipo de culpa por el final que tuvo quien fuese su amigo por tantas décadas, Mario Kreutzberger señaló que "yo no fui culpable. Mandolino se fue, me avisó un lunes que se iba y el viernes teníamos que hacer el programa. Ya trabajábamos muchos años juntos. Le dieron una pega por más plata, a él solo, ahí no era el segundo. Y dijo esta 'es la mía', pero duró poco tiempo, eso ya no fue culpa mía", cerró Mario Kreutzberger.