¿Por qué han fracasado los programas políticos? Expertos debaten

A esta hora se improvisa programa político

En medio de la crisis sanitaria y ad portas del Plebiscito Constitucional, los canales apostaron por programas políticos en distintos horarios: El regreso de Tolerancia Cero, en CNN Chile; Mesa Central y A esta hora se improvisa, ambos de Canal 13; Estado Nacional, de TVN; y Pauta Libre, de La Red.

Sin embargo, como consigna diario La Segunda, ninguno de los espacios televisivos ha logrado superar los 7 puntos de rating en promedio. Un fenómeno que, conforme al exdirector ejecutivo de Canal 13, Enrique García, se debe a que "es evidente que a la masa no le interesa la política".

"Yo no hubiese pensado que le iba a ir bien a un programa político en el contexto actual. Lo habrán hecho por razones editoriales, sabiendo que iban a tener 3 o 4 puntos", dijo al vespertino.

Por su parte, el expresidente del Consejo Nacional de Televisión (CNTV), Herman Chadwick, sostuvo que "hoy es difícil conformar buenos paneles. No tengo nada contra las generaciones jóvenes de políticos, todo lo contrario, pero estos programas requieren de una pachorra especial, como una seguridad de parte de los que intervienen. En sus tiempos A esta hora se improvisa era el evento del día, la gente lo esperaba al igual que Tolerancia Cero, pero lo que se decía ahí y quiénes lo decían era relevante".

Pauta Libre
José Antonio Neme, conductor de Pauta Libre

Sobreoferta

Un factor al que apuntó Jaime de Aguirre, exdirector ejecutivo de Televisión Nacional (TVN), es la sobreoferta de este tipo de espacios. "Hay muchos programas, que además tienen un lenguaje que no ha variado mucho en el tiempo, en el sentido de que la televisión es un fenómeno masivo y la política, en los niveles que se discute, no es un fenómeno tan masivo. Son masivos los temas que trata la política, pero para eso hay que hacer un esfuerzo de lenguaje, de temáticas, ser inclusivos, por decirlo de alguna manera", dijo.

No obstante, también precisó que "los programas políticos, nunca, ni en la época de gloria de A esta hora se improvisa, eran masivos de rating. Ni siquiera en la época de la Unidad Popular. Ganaba en sintonía el canal que ponía películas o series. No nos extrañemos si no marcan tanto".

Los paneles y la pauta

A su vez, el académico de la Escuela de Artes de la Comunicación de UC, Valerio Fuenzalida, hizo hincapié en los paneles que conforman los espacios. "Los canales deberían experimentar con otros personajes, que hagan una exhibición más dura de los problemas, que tengan otros puntos de vista. La industria no está haciendo un buen debate político. Se abusa de entrevista, por lo general con personajes que esquivan preguntas incómodas, se ha transformado en un género favorable al entrevistado y no a la audiencia".

Para Sergio Riesenberg, exdirector de Programación de TVN, las televisoras "no plantean lo que la gente realmente necesita. No hay ningún canal, ni siquiera TVN, que explique cuál es el fundamento o la idea central de cada partido político (...) No satisfacen las inquietudes de la gente que tiene problemas económicos y de salud. Siempre será bueno que existan programas políticos, pero lo que no me parece adecuado es que no traten los temas que a la gente le interesan".

"Ni los temas, ni los panelistas están bien elegidos. No son atractivos para la gente", dijo a La Segunda el también exdirector del Festival de Viña.

¿No hay espacio?

Junto con valorar el "esfuerzo de la televisión por volver atrás y buscar los programas", Herman Chadwick reflexionó que, "hoy, no sé si la paciencia del televidente esté para ver un largo programa político, creo que hoy estemos por la inmediatez. Se pensó quizás en que previo al Plebiscito iba haber una efervescencia por temas políticos y no lo hubo".

"No sé si el género tiene espacio en la TV, porque hay un tema de formato primero y después viene el análisis de invitados y panelistas. SI los canales definieron que iban por sintonías de menor impacto, al poner al aire estos programas, no hay mucho que criticar", comentó Enrique García.