Por Daniel Fuenzalida Ferdinand
La llegada de Sergio Nakasone a Chilevisión fue noticia en muchos medios. Se esperaba que el otrora hombre-rating pusiera su toque, su mano, su mirada en un nuevo proyecto. Hubo que esperar algunos meses hasta que la noche del lunes 6 debutó ???Bake Off???, una licencia original de la cadena británica BBC.
Las expectativas de la industria eran altas. Es que la trayectoria de Nakasone, quien hoy ostenta el cargo de Director entertainment content development de Turner Latin America, desde ???Protagonistas de la fama??? a las más exitosas versiones de ???MasterChef???, auguraban que el estelar tendría un toque distinto, un condimento especial. Sin embargo, no fue así. La mano del mago de los realitys shows no se notó. Todo lo contrario cayó en el peor error de un productor televisivo: buscar estereotipos, como la dueña de casa, la trabajadora, la inmigrante, el gay, etc.
La reacción de las redes sociales, el primer feedback de todo espacio en vivo, fue lapidario. El laboratorio social marcaba la pauta, pero el veredicto popular era drástico. Las audiencias no ???compraban??? los testimonios, las historias de vida, las imágenes de apoyo de un veterano ex boxeador que aseguraba haber peleado con Martín Vargas. La historia, perfectamente enlazada, no cuajaba. Dicho en los mismos términos del programa, estaba en el horno, siguiendo al pie de la letra la fórmula, pero no cuajaba.
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En forma paralela, Carolina de Moras intentaba empatizar con los concursantes. La animadora, protagonista de bullados escándalos de farándula durante los últimos meses, fue otro de los grandes escollos del debut. La modelo empleó su mejor sonrisa para conquistar a quienes postulaban a crear el más sabroso pastel, pero la forzada simpatía se desinflaba en cada momento. El abismo entre los concursantes y ella era de proporciones. Su escasa calidez y cercanía ???atributos imprescindibles para este tipo de programas- le jugaron una mala pasada a Nakasone, quien ???a estas alturas- parece haber extraviado la brújula.
Imposible dejar de mencionar al jurado, Yann Yvin, Gustavo Sáez, y Milena Vallejos. Si bien el trío cumple su labor sin reparos, en la primera edición hubo una situación digna de análisis. Danae de la Jara, una de las postulantes al gran premio, mostró una torta de chocolate con frutos rojos, pero a la hora de explicar la receta y cómo la hizo, no supo. Fácil era predecir una situación de este tipo.
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En términos estrictamente técnicos, el programa cumple las férreas normas de la BCC. Se graba en una de los parques de Las Vizcachas en un gran esfuerzo de CHV. Para dar forma a las grabaciones se instaló una gran carpa que sirve de estudio. No hay errores de iluminación ni de tiros de cámaras.
Sergio Nakasone, el rey Midas de la TV, quedó al debe en su debut en CHV. Si bien pasó las barrera de los dos dígitos de rating (12 puntos) fue una noche de dulce y agraz para el realizador argentino. Por un lado una audiencia más que aceptable en la actual escena; por otro, una lluvia de críticas por no mostrar nada nuevo.
Eso si, falta agua que corra bajo el puente. Es de esperar que en los próximos capítulos se note su mano que tantos réditos dio a su anterior empleador, Canal 13.
