En un sorprendente recorrido por el mundo del cementerio para la sección "Este es mi mundo" de Zona de Encuentro, Mauricio Pinilla descubrió la serenidad y pasión con las que los trabajadores fabrican las lápidas y floreros que adornan las tumbas.
El exfutbolista conoció las historias y oficios de floristas y sepultureros, conversó con ellos, y los acompañó a desempeñar sus labores, pero además, su visita al cementerio lo llenó de emoción porque le permitió visitar la tumba de sus abuelos, con quienes tenía una relación muy cercana.
Durante la emotiva escena, el conductor del espacio se acercó a la sepultura, recordando a su abuela, Concepción Molina. "Yo no quería revivir esta experiencia porque me produce mucha nostalgia, muchos recuerdos", dijo. "La sentí cerca de mío. Fue difícil estar relajado en ese momento, me sentía muy emocionado porque tuve muchos recuerdos en mi cabeza", agregó.
"Ella es la pérdida más importante que he tenido. Fue una mujer maravillosa, con una vida sufrida, que sacó adelante a sus nueve hijos y de dedicaba mucho tiempo a sus nietos. Me cocinaba todo, me cuidaba, me encantaba quedarme en su casa. La recuerdo mucho y la echo mucho de menos, pero sé que me acompaña siempre", sostuvo.
Otra faceta de Pinilla
Asimismo, Mauricio Pinilla fue parte de un tour nocturno en el cementerio General, realizado por actores, que mezcla historias de terror con un recorrido patrimonial. En la actividad, el rostro de TVN mostrará otra faceta al disfrazarse de un vampiro e incluso incursionar en el humor con el personaje de un cuidador del lugar que, según dijo, tenía un look parecido al recordado "Washintong" que interpretó Felipe Camiroaga en Pase lo que pase.