Una insólita amistad con el fallecido exmandatario de Venezuela, Hugo Chávez, reveló el conductor de Sin Filtros (Canal Vive), Gonzalo Feito, en la más reciente emisión del programa de conversaciones La divina comida (CHV), sorprendiendo a los demás presentes por lo inesperado de la confesión.
Y es que, la velada contó también con la participación del exrostro de La Red, Eduardo de la Iglesia, la show woman argentina Cristina Tocco y la cantante nacional Coni Lewin, quienes le consultaron a Feito sobre sus inicios en la televisión.
Así, el periodista, tras confesar que no le gustaba la carrera por su duración y las formalidades que se deben guardar a la hora de entrevistar, expuso que su primer acercamiento con el rubro fue cuando "entré a hacer la práctica a la televisión y en el transcurso de pasar por distintas radios fui conociendo a distintas personas. Habían varios que trabajaban en canales, entonces un día llegue y dije 'flaco, necesito hacer la práctica', 'ya, Feito, ándate a Chilevisión, a Extra Jóvenes", reveló, explicando que "yo hacía los móviles, las notas y los reportajes".
Luego, se le preguntó por el políticamente incorrecto programa Caiga quien caiga (CQC), del que fue parte por varios años, consagrándolo como rostro en el espectáculo criollo.
"(Llegué a CQC) tiempo después. Seguí harto los formatos argentinos y empecé a hacer cosas que caminaran como por ese lugar (transgresor). Llega el formato a Chile y me llaman por teléfono. Me dicen que el canal quiere el programa y me llaman: 'che, Gonza, ¿tenés pasaporte? Nos vamos en 20 días más, a Los Ángeles que hacemos los (premios) Oscar'", apuntó, revelando que así tuvo la oportunidad de "agarrar para el hueveo" a varias celebridades internacionales, entre las cuales mencionó a "Uma Thurman, Al Pacino, varios artistas que ya los conocía... John Secada, entonces le decía 'John ¿Una secada?' y chistes así", expresó el periodista con soltura.
Sin embargo, el vínculo que más sorprendió a los comensales en su casa fue la relación, que él definió de amistad, con Hugo Chávez: "hacíamos las cumbres de los presidentes. Tenía muy buena amistad con Hugo Chávez, que decía 'el chileno, que venga para acá'. Yo le caí en gracia, le regalaba pelotas y guantes de béisbol, porque él era besisbolista, y siempre me ayudaba a sacarle entrevistas o a pasarle los lentes a Fidel Castro, que eran muy amigos", dijo, revelando algo que tanto De la Iglesia como Lewin, fuera de grabaciones, calificaron como "loco".