Luego de tres años fuera de la pantalla, este sábado 9 de abril, a las 17:35 horas, y como parte de la franja Cultura tarde, retornará a Canal 13 el programa gastronómico Plato único con su cuarto ciclo, esta vez centrado en la pandemia.
En esta temporada, Marcelo Cicali, conductor del espacio, conocerá las historias de quienes siguen empeñados en mantener sus emprendimientos gastronómicos a pesar de la dura crisis que enfrenta el país. También se encontrará con quienes no pudieron resistir y debieron cerrar sus negocios con una trayectoria de décadas y mostrará a aquellas personas que descubrieron en la cocina una forma de paliar las dificultades actuales.
Y dentro de esa última línea es que en la primera emisión de Plato único 2021 se presentará el caso de Julio Milostich, destacado actor de teleseries como El señor de la Querencia, Secretos en el jardín y Primera dama. El intérprete reaparecerá en televisión a dos años después de haber interpretado a su personaje protagónico en la telenovela Río oscuro y lo hará mostrando su nueva faceta de cocinero, a la que llegó producto de la crisis laboral que enfrentó en medio de la pandemia.
"Llegó un momento en que Julio se vio sin dinero, sin proyectos y sin trabajo, y viendo que una de las mejores cosas que sabía hacer, además de la actuación obviamente, era cocinar, se lanzó a esta aventura y partió vendiendo almuerzos a la comunidad de su exedificio y hoy ya tiene su pyme centrada en empanadas", cuenta Cicali, conductor de Plato único, quien añade: "en medio de la crisis de la pandemia, encontró sus aliados en el horno, las ollas y sartenes, y hoy ama la cocina tanto como su carrera de actor".
Por su parte, Milostich destaca que "lo que se va a ver este sábado en Canal 13 podríamos decir que será como el secreto del mago, porque me van a ver en la intimidad, los voy a recibir en mi casa y van a poder ver cómo y dónde hago las empanadas, y con un gran anfitrión como es Marcelo Cicali. ¿Quién mejor que él para hablar de estos temas? Van a ver un momento de felicidad muy grande de mi vida, porque esto que hago ahora me ha ayudado para parar la olla, es decir, económicamente, pero también me ha servido para mantenerme ocupado. Yo creo que es un buen antídoto para esta porquería de bicho y me mantiene despierto, feliz y creativo, cosa que se ha restado de la vida de los actores en este tiempo, en donde no hay movimientos en las tablas".
El intérprete agrega que lo hace muy feliz el recibimiento que tiene su comida en quienes le compran. "Cuando recibo críticas o comentarios de la gente, para mí es como un aplauso. Hago la analogía del proceso como si estuviera actuando. En ese sentido, esto me tiene súper contento, ya que si bien cocinaba antes, nunca de la manera que lo estoy haciendo ahora. La pandemia reavivó el gusto que tenía por la cocina y me di cuenta que era mucho más de lo que pensaba", comenta.
Asimismo, el intérprete rememora que “partí cocinando porotos con riendas y lo ofrecí en mi exedificio y me fue bien. Y cuando a uno le va bien con algo que le encanta hacer, me fue prendiendo luces, entonces la segunda vez lo hice con más ganas e hice cazuela y las vendí todas. Y así seguí, hasta con sopaipillas”, dijo, añadiendo que “después me dije ¿qué otra cosa me gusta mucho? Y yo amo las empanadas, pero nunca había hecho empanadas en mi vida, entonces hablé con la Nona, que es la abuelita de mi hijo que vive en Villarrica y me dijo cómo hacerlas, así que probé y la verdad es que desde ese día no he dejado de hacer empanadas. Me encanta”.
Su emprendimiento
Hoy Julio Milostich vende sus empanadas por redes sociales en la cuenta de Instagram empanadas_la_querencia, es decir, le puso el nombre de su emprendimiento a uno de sus roles más recordados y ya está en los preparativos para tener su propio local. "Para allá voy todo el rato, ese es mi objetivo mayor, pero cuesta un mundo, sobre todo ahora. Eso sí, estoy seguro que lo voy a lograr, tener un bolichito lindo, con los letreros afuera y con los permisos que ya se están gestionando", afirma.
En cuanto a la actuación, el actor responde lo siguiente: "En el teatro, el espíritu y alma del trabajo es un todo, es la cortina que se cierra, el público que va entrando, el abrazo con el compañero, lo que pasa en maquillaje… todo ese mundo que no sé cuánto tiempo va a pasar para que lo retomemos, y online no puedo hacerlo. Llegará el momento en que lo tenga que hacer por alguna necesidad, obviamente, pero el teatro online no lo puedo digerir aún".