Hace dos días, Televisión Nacional (TVN) estrenó en horario prime la serie La sangre del camaleón, ficción que se mantendrá durante todos los jueves de agosto en horario estelar. Se trata de una millonaria producción que, en palabras de Javier Rebolledo, codirector de la serie junto a Daniel Uribe, no solo intenta innovar en aspectos estéticos y narrativos, sino también éticos.
En diálogo con El Filtrador, el también periodista de investigación explicó cómo se llevó a cabo el minucioso trabajo creativo detrás de la serie que, por el año 2018 se adjudicó $488.550.965 de los fondos destinados por el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) para el fomento de producciones audiovisuales nacionales, revelando que la ficción está diseñada en función de que, en cada capítulo, los hechos narrados comiencen a delinear una realidad cada vez más sórdida.
Asimismo, el profesional aclaró que la crisis económica a nivel nacional e internacional tras el "estallido social" y la pandemia del Covid-19, obligaron a que la producción tuviera que ser repensada, reduciendo los ocho capítulos pactados inicialmente a la mitad.
La trama principal se centra en Mario Lara, un empresario comunista exitoso que posee el club nocturno Flamingo. Durante la dictadura militar, tanto los esbirros como los altos jerarcas del régimen acudían al lugar para divertirse y estrechar lazos con Mario.
Sin embargo, los agentes poco y nada saben de la doble militancia de este "rey de la noche". Secretamente, Lara utilizará su personalidad camaleónica y las dependencias del Flamingo para ayudar al Frente Patriótico Manuel Rodríguez a ingresar armas a Chile para hacer frente a la dictadura.
Destacando un elenco compuesto por Daniel Alcaíno, Luciana Echeverría, Álvaro Valenzuela y Óscar Castro, Javier Rebolledo enfatiza en que los puntos fuertes de La sangre del camaleón se remiten principalmente a la forma en que están diseñados los personajes, las influencias narrativas y la banda sonora, elementos que confluyen para dar vida a una historia que, en palabras de su director, toma distancia de otras ficciones que se basan en las atrocidades cometidas durante la dictadura.
¿Cuál fue la razón detrás de la decisión de reducir los capítulos de la serie de ocho, que se habían planeado inicialmente, a solo cuatro?
El proyecto ejecutado por la productora Inteligencia Colectiva y Daniel Uribe, como varios proyectos más y como varias otras casas productoras, sufrieron las consecuencias del "estallido" y la pandemia. Esto provocó sucesivas postergaciones, que significaron gastos considerables. El proyecto se retomó a fines del 2022. La situación del país y del mundo, entre la adjudicación el 2018 y el 2023 eran muy distintas, lo que nos obligó a adaptar la obra para hacerla viable. De ahí la reducción de capítulos.
¿Cómo fue el proceso de adaptación de la investigación periodística del libro a una ficción?
La idea de "La sangre del camaleón" se inspiró en el libro periodístico "Camaleón", pero no se basó en él. Por lo tanto, tuvimos la libertad de desarrollar una historia de ficción en torno a hechos históricos. En el guion trabajé con Cecilia Ruz, con quien creamos una historia dramática siguiendo las reglas de la ficción, pero manteniendo un fuerte vínculo con los hechos históricos ocurridos en Chile durante 1985 y 1986, como la internación de armas en Carrizal Bajo, el atentado a Augusto Pinochet y la represión y crímenes cometidos por la CNI. Nuestra intención fue crear personajes complejos y realistas, alejados de las caricaturas. Además, nos esforzamos por respetar los derechos humanos y romper con la estética clásica de las series y películas sobre este tema, utilizando música de moda de la época y una estética y dinamismo con influencias del cine negro y narrativas similares a las de directores como Hawks, Scorsese y Di Palma, entre otros. La serie muestra el consumo de drogas y el mundo de la vida nocturna de aquellos que tienen poder y son los "dueños de la noche". Desde allí, el empresario "derechista" Mario Lara, también conocido como "el rey de la noche", organiza su misión secreta de resistencia a la dictadura.
Teniendo en cuenta que se basa en el libro ya publicado, ¿cuáles son los aspectos más impactantes o sorprendentes que se podrán encontrar en La sangre del camaleón?
La serie cuenta con elementos novedosos tanto en lo estético como en la banda sonora, la cual fue cuidadosamente producida. Uno de los aspectos más impactantes a nivel dramático es la humanidad con la que se presenta el mal, la delación, la tortura y el crimen. Los personajes son encarnados y, en un principio, se les muestra en situaciones triviales y "humanas", para luego ser testigos de los horrores que cometen. Todo esto se desarrolla en paralelo a la historia de otras personas víctimas u "obligadas" a colaborar. La mezcla de blancos, negros y grises, tanto en términos estéticos como éticos, es lo que hace que este trabajo audiovisual sea tan violento e impactante. La serie muestra cómo lo peor del ser humano se ha vuelto natural en lo cotidiano, con la mentira y el crimen presentándose como virtudes. "Nada es lo que parece" es una de las premisas de la obra, pero también se profundiza en cómo el estado de incertidumbre y depresión fue el magma primigenio de lo nuevo y de la resistencia ciudadana.
¿Cuál es el sentimiento que experimenta usted y su equipo al ver la obra en las pantallas de televisión después de tantos años de trabajo, especialmente en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado?
Durante el proceso de producción de esta serie, hemos experimentado una gran emoción. A pesar de que comenzamos con un grupo reducido, el proyecto creció y contamos con la colaboración de personas extraordinarias en todas las áreas, quienes trabajaron con una voluntad y cariño excepcionales por la obra. Este ambiente se mantuvo presente durante todo el proceso, desde la preproducción hasta la postproducción, lo que nos genera una gran gratitud y orgullo. Esperamos que el trabajo genere una discusión en torno a su calidad, entretenimiento, emoción y si logra identificarnos, así como las reflexiones que podemos hacer en torno a las temáticas que aborda.