En su primera entrevista extensa luego de su paso por el Festival de Viña del Mar, la comediante Belén Mora reveló que su actuación en el escenario más importante del país estuvo precedido por dos años complejos en términos laborales y emocionales, incluyendo la pérdida de un bebé en gestación, meses impagos por la crisis que atraviesa La Red, canal donde conducía el programa Políticamente Incorrecto, el que saldría del aire, el embarazo y nacimiento su hijo con síndrome de Down de nombre Rafael, una depresión, el tratamiento por su condición de bipolaridad y el acoso constante en redes sociales.

“Mucha gente me preguntó si me había quedado hasta el final (de su rutina en Viña 2023) porque pensaba que lo iba a dar vuelta, pero no, me quedé porque quería ver de dónde venían las pifias, porque no las veía, solo las escuchaba”, admitió “Belenaza” en conversación con Sábado de diario El Mercurio.

Como ella misma reconoce, luego de su actuación en la Quinta Vergara, junto a su pareja e hijo, decidieron aislarse en una zona rural de la Región de O’Higgins para analizar lo sucedido en Viña del Mar, instancia donde “explotó” después de haber pasado momentos complejos en el ámbito personal.

“Dedicamos un día, nos tiramos en el pasto como a las cuatro de la tarde, a la sombra de un árbol y dijimos: ‘ya, hablemos de todo, hablemos de la huevada’. Ahí descansé, decanté, lloré, analicé, profundicé, reflexioné, pensé en mi hijo. Venía con una acumulación de emociones contenidas tan grande, que Viña fue la gota que rebasó el vaso. Ahí bajó todo y empecé a llorar por cada cosa… boté, boté, boté, boté”, confesó.

«Esto hay que hacerlo»

Meses antes de Viña del Mar, Belén Mora debutó en el streaming gracias a una rutina inédita que grabó en diciembre de 2022 para Amazon Prime Video, la que no estuvo exenta de dificultades, pese a la gran oportunidad que le significa aparecer en una plataforma internacional.

Por aquel entonces su hijo Rafael, de siete meses, era sometido a una intervención a corazón abierto por una cardiopatía. “Era una operación programada, pero se alargó su estadía en la UCI porque tuvo complicaciones. Entonces parte de la rutina presentada en Amazon yo la escribí en la UCI”, reveló.

Sin embargo, no pensó en dejar de lado la oportunidad que se le presentaba, pese al trance de su hijo. “Pensé: ‘esto hay que hacerlo’… quizás es una forma de pensar equivocada, pero en el mundo de la actuación hay muuuchas personas esperando, entonces si a una se le da una oportunidad como esta, la tiene que tomar. Y también para mí el trabajo es terapia: me terapea hacer reír”, sostuvo para diario El Mercurio.

Asimismo, Mora confesó que “tengo trastorno bipolar”, por lo que su terapista le adelantó que tras presentarse en Viña del Mar iba a sufrir “un bajón”, lo que efectivamente sucedió. “Pero me estoy sanando. Hoy me siento más tranquila, más vulnerable, a ratos me siento más débil y a ratos más fuerte, pero siento que, para todos estos procesos, estos traumas, estas situaciones límite que uno vive, uno debe trabajar para sacarle lo mejor… y en ese proceso estoy. No quiero quedarme en lo malo, sino que de lo malo sacar una lección. Estoy siendo súper responsable conmigo, porque siento que el año pasado me dejé de lado… Es tan terapéutico hacer reír, pero a veces te das cuenta de que mientras más haces reír al resto, menos te estás haciendo cargo de lo que te está pasando. A veces utilizamos el sentido del humor como mecanismo de defensa y ahora me siento sin ese mecanismo de defensa”, sentenció.