Este domingo, Canal 13 emitió un capítulo especial de su exitoso programa «Contra viento y marea». Tal como lo había adelantado su conductor, Francisco Saavedra, hace un par de semanas, la producción del espacio se puso en contacto con exparticipantes con el objetivo de mostrar lo que ha sucedido con las parejas que han protagonizado esta tercera temporada.
Una de las historias que conmovió al país fue la de Valentina. La joven quería cumplir el sueño de su novio Ricardo de contraer matrimonio, pese a un tumor en la médula espinal que lo mantenía postrado en su cama.
Luego de sortear una serie de obstáculos, la pareja logró casarse. Sin embargo, producto de la enfermedad el joven falleció un mes después. A seis meses del suceso, Valentina contó cómo ha sido su vida sin su marido. “Estoy tranquila”, confesó a Pancho Saavedra, agregando que “siento que me acompaña en todo momento”.
“Él no solamente me entregó amor, también me dejó muchas enseñanzas en la vida y lo amo con toda mi alma, es un amor que jamás en la vida se va a acabar”, sentenció.
Asimismo, Valentina reveló a Saavedra que siempre tuvo la esperanza de que su pareja se iba a recuperar. “Al final entendí que él quería descansar, lo necesitaba. Tuvimos una conversación y le dije: si tienes que irte para descansar, tienes que hacerlo. No quiero implorarte que hagas algo sólo por mí”, recordó.
La historia que hizo llorar a Saavedra
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La historia de Nataly y Carlos fue otra que emocionó a los televidentes. La pareja llegó al programa gracias a un mensaje en Twitter donde pedían ayuda a varios rostros de la televisión para poder casarse, luego que el Registro Civil les diera hora para marzo de 2019.
La fecha para muchas parejas podría ser considerada buena, pero para ellos no puesto que tenían poco tiempo debido a que la joven sufría de un cáncer cervicouterino en etapa cuatro, por lo que le quedaban pocas semanas de vida.
El propósito de la pareja no era solo casarse, si no que además conseguir que Carlos obtuviera la custodia legal de los hijos de Nataly, a quienes consideraba como hijos propios. Con esta resolución evitarían que, una vez fallecida la joven, los niños pasaran al juzgado o incluso el Sename.
La pareja contrajo matrimonio en una emotiva ceremonia. Dos meses después la joven falleció. Tras lo sucedido y en medio de un profundo dolor, Carlos consiguió la custodia de sus hijos. “Me da tranquilidad saber que mis niñas están conmigo. Mi guatona me dejó un mensaje de tranquilidad, y sé que mis hijas quedarán conformes al saber que tienen un ángel”, precisó.
Nueve meses después, la producción de «Contra viento y marea» se contactó con Carlos, quien se reunió con el conductor del espacio, a quien le reveló cómo ha sido su vida desde la muerte de su esposa.
“Fue difícil. Hay días en que no quiero hacer nada, no me quiero ni mover”, comentó, además de asegurar que sus hijas extrañan mucho a su mamá, pero “ahí tengo que estar para apapacharlas”.
Carlos no solo cumplió el sueño de casarse y de tener la custodia de sus hijas, si no que además, gracias al programa y al Ministerio de Vivienda y Urbanismo, se convirtió en dueño de la vivienda que compartió junto a su esposa por casi siete años. “Ella me hizo sentir que estaba presente en todo momento”, puntualizó.
